Razones para la inclusión

Desarrollar escuelas con carácter inclusivo requiere una tranformación profunda de las representaciones de las sociedades, de las personas en particular, así como cambios de actitudes y cambios en las acciones.
La construcción de escuelas inclusivas se convierte en una aspiración a la que apuntan los esfuerzos de grupos organizados de docentes. Más allá de un concepto restringido al ámbito de la población con discapacidades, la conceptualización se inscribe en procesos que devienen de los procesos de exclusión de grupos tradicionalmente alejados de la educación.

Soy consciente de que todavia hay posturas poco favorables a la integración o a la escuela inclusiva, que existen reticencias en muchas personas.
Los cambios que se han producido en los colegios son claramente positivos para todo el alumnado, no solo para el alumno con alguna discapacidad, en desventaja social o inmigrante, sino para todos los alumnos en general.

Al principio de la implantación del nuevo modelo educativo, se reproducen los esquemas en cuanto a prejuicios existentes, como por ejemplo la falta de atención a uno u otro niño del aula, disminución de la atención especializada, descenso del nivel de aprendizaje...
Siempre con una buena práctica docente y organizativa estos obtáculos se superan con creces. La solución nunca falla cuando el profesorado está informado, formado, convencido y comprometido con la opción inclusiva en la escuela.

Video de una guarderia de integración.